Ir al contenido principal

La escucha de la Naturaleza en tiempos de aislamiento IV


“El futuro pertenecerá a la naturaleza inteligente: aquellas personas, familias, empresas y líderes políticos que desarrollen una comprensión más profunda del poder transformador del mundo natural y que equilibren lo virtual con lo real. Cuanto más nos convertimos en “altamente tecnológicos”, más naturaleza necesitamos.”
Richard Louv

Durante mi toma de consciencia, tuve que dejar de lado mi trabajo presencial. Pero pasé a investigar sobre mí misma, al tiempo que también seguía usando el sonido en mis consultas online. Investigando y observando qué sucedía (con la guía de Eva Julián) mientras aplicaba mis prácticas y observaciones, aquellas terapias que había ido aprendiendo mientras las trabajé como veterinaria, ahora sobre mi propio campo vibratorio.
Aún conservo muchas de mis notas sobre la aplicación del sonido y las analogías que establecía con mi experiencia en los animales.
Me gustaría que fuesen útiles y que más y más personas pudieran hacerse conscientes de que su unión "natural" a la Naturaleza (valga la redundancia) les puede ayudar a sanar sus propios procesos.

Esto que me sucede, parece que es, al final, un Síndrome de Sensibilización Central, en el que hay aún bastantes divergencias e incógnitas, pero al que estoy empezando a mirar desde otros ángulos. La mejoría en tu calidad de vida y cómo percibes lo que te sucede, aporta muchísima claridad a cualquier circunstancia que nos envuelve.

En mi caso, como en el de otras mujeres, muy asociado al ciclo menstrual.
Debido a esto, he usado el sonido muy a menudo. Lo he aplicado de muchas maneras.
Y me ha ayudado (y aún me ayuda en tiempo presente) a sostenerme y a acompañarme cuando los síntomas son muy intensos, rebajando los efectos que tienen sobre mi organismo.

Por eso siento que mi experiencia puede beneficiar a muchísimas personas.

Y por eso he decidido hacer unos pequeños post para mi blog, para que sean el inicio de los muchos que me gustaría haber escrito ya, describiendo desde la experiencia (porque la parte técnica la confío plenamente a la investigación de Eva Julián y a la suya) cuánto bienestar han producido y producen en mí.

Dando detalles sobre cómo siento con cada uno; pues en mi experiencia clínica, ha sido así como he podido acompañar a mis pacientes y sus humanos (núcleo familiar al completo) en sus procesos curativos. También cómo he podido observar cómo han ido funcionando en los demás, animales y humanos.

Les cuento, por ejemplo, cómo van a ir observando que su animal está más sereno cuando utilizan un sonido.

Cómo saberlo: demanda menos atención, come más despacio, no bebe tanta agua o no lo hace desde la compulsión, es capaz de permanecer más tiempo en su camita o mantita... podrían ser algunos ejemplos (les acompaño mientras aprenden a valorar la evolución de los signos)

Y respecto al humano, cada uno tenemos un modo de experimentar, así que les expreso cómo voy sintiendo la relajación de las tensiones en mi abdomen, cómo el flujo de la respiración se hace más pausado, cómo voy sintiendo que la presión mandibular desaparece, cómo me voy haciendo consciente, por ejemplo, de que tras esto hay un pensamiento inconsciente, pero recurrente, (por ejemplo) de miedo a no tener suficiente. Cómo me adentro ahí desde una presencia orgánica diferente.
Ese es el mecanismo.

Para mí está interiorizado y a ellos les ayuda a observar, desde su propio interior, cómo afrontar los bloqueos que les paralizan.


Adentrarnos en nosotros mismos no es tarea sencilla. Avanzar en nuestras sombras, en aquello que nos duele ver. Pero muchas personas (cada vez más afortunadamente) a través de sus animales y su potente vínculo con ellos, y con la Naturaleza, inician este proceso y se sostienen mucho mejor a través de ese espejo, equilibrando a un tiempo todo el núcleo familiar. La Naturaleza, como nos están mostrando ahora mismo las fotografías de animales en ciudades, playas, tranquilamente paseando por los montes y los cielos; o plantas creciendo en medio del asfalto, la lluvia cayendo en lugares en los que había sequía, el silencio urbano donde se vuelven a escuchar los pájaros..., siempre sigue adelante. Guarda siempre un equilibrio en el cambio constante, incluso pese a nosotros.


El acompañamiento sonoro con la vibración amorosa de la hermana Naturaleza facilita notable y agradablemente el “salto” que uno da hacia su interior, trabajando a un tiempo tanto las emociones más físicas que surgen de los procesos orgánicos de la interacción animal-humano, esas otras emociones que el humano o el animal viven en el proceso de enfermedad, como esas emociones ocultas (en negación) que los humanos tenemos y no queremos/podemos/sabemos ver.


Espero que el uso de la tecnología estos días y la vibración que nos rodee, no sea para meternos hacia adentro y aislarnos de las personas con las que convivimos y de las que estamos muchas veces alejados por nuestro celular, ordenadores, televisores y su actividad virtual, sino para utilizarla de un modo consciente, apropiado, manteniendo un entorno salubre a nuestro alrededor. 

Disminuyendo, por citar algunos ejemplos, la cantidad de información “basura” que consumimos, los contactos virtuales superficiales y las horas de redes sin intención alguna, solo por aburrimiento (como cuando abrimos cien veces la nevera) y aumentando los contactos conscientes para alegrar, animar o transmitir afecto a los demás o acompañar al que está sufriendo.


O, como en el caso de los sonidos de la naturaleza, la usemos para aplicarnos campos vibratorios sonoros utilizando la tecnología, para nuestro bienestar y el de los que conviven con nosotros.





Comentarios

Entradas populares de este blog

Comunicación no verbal. Señales de Calma en el perro

Fotografía de Masmorelia.com Todo en la Naturaleza está interconectado. Somos información y nos comunicamos de manera recíproca aunque, a veces, los humanos nos olvidemos de ello. Los perros son capaces no sólo de aprender centenares de palabras en distintos idiomas y leer nuestro lenguaje corporal o facial, o entender nuestras emociones a través de ellos, sino que también son capaces de expresarse entre ellos mismos, otros animales y nostros animales-humanos a través de su propio lenguaje corporal y facial , sus orejas y  cola y los sonidos que emiten, como los gruñidos . ¿Qué son las señales de calma? ¿Para qué sirven? ¿Cómo podemos aprenderlas y entender lo que nos dicen nuestros compañeros? ¿Cómo podemos utilizarlas para "hablar" perro y permanecer conectados a ellas? Para aprenderlo, os dejamos una re comendación literaria: " El lenguaje de los perros. Las señales de calma ", Turid Rugaas *(Siempre que os sea posible y un libro no esté descatalog...

El vínculo animal como recuerdo del ser humano social

"Las grandes ciudades surgieron en el último siglo, pero nuestra vida social es la misma que hace cien mil años."  Robin Dunbar Una de las mayores enseñanzas que me han ofrecido la adopción/acogida de animales en mi propio núcleo familiar, el trabajo en clínica de pequeños animales y mi participación activa en y con asociaciones de protección animal, ha sido cómo, sólo desde la conciencia propia , se realiza la introducción de un cachorro con éxito. Cuando algunos de los pasos más sencillos de autoconocimiento no se dan bien, pueden no sólo llevarnos al fracaso en la adopción, sino al fracaso en la educación de nuestro compañero y a que este no adquiera los aprendizajes necesarios para desenvolverse en un mundo donde la mente humana, su velocidad y la escasa conexión en nuestros hemisferios cerebrales, nos conducen a generar nuestra realidad en el día a día desde el estrés y la ausencia de "auto-conciencia". Esto le y nos "perseguirá durante toda la v...

Emociones en el Núcleo Familiar y su importancia clínica

Tras muchos años pasando consulta, si los animales y sus humanos me han mostrado algo siempre, como una constante, es la hermosa unión emocional que hay entre ellos. El animal llega a tu consulta, muchas veces mostrando sólo que está "raro", "distinto".. Con síntomas inespecíficos, que pueden pasar por un leve descanso en alimentarse porque está empachado a una patología muy grave, que empiece a "asomar" como síntoma orgánico. Ante estos ambiguos casos exploras, revisas al microscopio, examinas la sangre y/o otros fluidos, haces una radiografía.. Haces pruebas para encontrar el orígen. Hay veces que puedes observar directa y rápidamente qué está ocurriendo, pero muchas otras los resultados dejan el caso en un montón de posibles diagnósticos diferentes. ¿Qué hacer ahí? Ahí sólo puedes repasar lo que ha ido ocurriendo en el núcleo familiar mientras aparecía el síntoma, si ha habido cambios en él, en la dieta, en el paseo... Mi experiencia en ese sent...