¿Quién
soy?
Como
dice Nur, una preciosa delfín blanca, soy Eva, una mujer en el
planeta Tierra. Eso siento.
¿De
dónde vengo?
Siempre
quise ser veterinaria, desde que tengo uso de razón. Es mi vocación
y pasión.
Practiqué
más de 20 años la Medicina convencional y la cirugía de
tejidos blandos en mi pueblo natal (desde el 1995 hasta el momento presente).
Aunque
muy comunicativa, sensible y ligada a la Naturaleza, siempre he sido
muy "científica" y cualquier cosa que se alejara de lo
preestablecido por la Ciencia (que ahora sé "oficial") me
parecían majaderías que nada tenían que ver con mi trabajo..
Pensaba
que los seres vivos y los humanos éramos biología con conciencia. Y
poco más.
Ni
credos ni dogmas que me sonaran a "misticismo".. Católica
de cuna, no practicaba ni creía en nada..
Todo
eso me sonaba extraño, me chirriaba e incluso me provocaba la risa..
Cómo es el orgullo, que precede a la caída, y qué bueno todo lo
que me pasó y me brindó la oportunidad de mirarme con honestidad y
humildad..
Llevo ya
un largo periplo de tiempo, desde mi infancia, por lo que conocemos
como "enfermedad", un camino que algunos recorremos para llegar hasta nosotros mismos, revincularnos sanamente y, así, unirnos y vincularnos amorosamente a los demás.
Tras vivir una experiencia muy intensa, trascendental y progresiva (que removió todos mis sistemas de creencias y me está haciendo, paradójica y paulatinamente, recuperar la salud) todo lo que antes tenía como "cierto" dejó de serlo.
Tras vivir una experiencia muy intensa, trascendental y progresiva (que removió todos mis sistemas de creencias y me está haciendo, paradójica y paulatinamente, recuperar la salud) todo lo que antes tenía como "cierto" dejó de serlo.
Afectó
a todo mi ser y transformó y mejoró a mi humana como herramienta
clínica poniéndome al servicio del Reino Animal y su Maestría,
para mostrar a los demás humanos que así lo elijan, que caminar el
sendero de recordarse iguales en la Existencia que todos los seres de
los distintos reinos que conviven con nosotros, respetándolos en su esencia y honrándolos como compañeros amorosos de camino, nos devuelve, desde la humildad, todo el
poder creador que somos capaces de experimentar para, responsabilizándonos de nuestras vidas y nuestros actos, pensamientos y palabras, transformar
nuestra realidad y convertirnos en nuestra mejor versión.
Lo
que me ocurrió, gracias a seres maravillosos como Vicente Herrera y Antonio Ruiz, médico y psicoterapeuta respectivamente, sé ahora que
está descrito por Stanislav Grof (uno de los creadores de la Psicología Transpersonal) como Emergencia Espiritual y que no todos
lo vivimos como tal.
En
mí, que no tenía relación alguna con religiones, corrientes de
crecimiento personal o nada que sonara a "espiritualidad"
(la verdad, todo eso, por mi ignorancia, me resultaba disonante y me
hacía fruncir el entrecejo y poner el ceño) fue algo bastante
extraño que me tambaleó de arriba a abajo.
Ahora sé que todo ese estrés venía de un enefermedad física crónica sin diagnosticar, que me brindó la oportunidad de colapsarme y caer, para despertar a una conciencia mayor.
Ahora sé que todo ese estrés venía de un enefermedad física crónica sin diagnosticar, que me brindó la oportunidad de colapsarme y caer, para despertar a una conciencia mayor.
Ahora
siento la certeza de corazón de que somos Conciencia con Biología..
Ahora,
me dedico a ser nexo consciente entre el animal y su humano de otra
manera.
Aunque aún navegue en la razón, porque no es sencillo salir de esos sistemas de creencias que me han condicionado, mi corazón se va abriendo cada vez más a una dimensión mayor, que no sé hacia donde me conduce, pero que cada vez me hace conectarme más profundamente al campo eléctrico de mi corazón, sentirme más amada y más en paz, más presente en el ahora y con más circuitos neuronales para la Fe y la Confianza. Más y más anclada en la aceptación como punto de partida a una nueva dimensión de mi ser y del ser de todos los elementos de esta "creación" que ante mí se presenta como una nueva realidad, con todos los atributos de un Espíritu amoroso que todo lo une y conecta con hilos cada vez más tangibles y de algún modo "físicos" para mí.
Aunque aún navegue en la razón, porque no es sencillo salir de esos sistemas de creencias que me han condicionado, mi corazón se va abriendo cada vez más a una dimensión mayor, que no sé hacia donde me conduce, pero que cada vez me hace conectarme más profundamente al campo eléctrico de mi corazón, sentirme más amada y más en paz, más presente en el ahora y con más circuitos neuronales para la Fe y la Confianza. Más y más anclada en la aceptación como punto de partida a una nueva dimensión de mi ser y del ser de todos los elementos de esta "creación" que ante mí se presenta como una nueva realidad, con todos los atributos de un Espíritu amoroso que todo lo une y conecta con hilos cada vez más tangibles y de algún modo "físicos" para mí.
En
cuanto a mi formación académica, por la que siento mucha gratitud,
no me extenderé mucho..
Siempre
me ha encantado estudiar aquello que me gusta, así que me pasé la
vida entre libros de texto sobre Fisiología, Técnicas y
Fisiopatología Quirúgicas y Médica y, más tarde gracias a
internet, buscadores de Medicina humana y Medicina veterinaria con
los artículos y trabajos, ponencias, talleres y demás, que se van
publicando en distintos países y congresos sobre Endocronología,
Dermatología, Urogenital, Etología...)
Como
la mayoría de mis compañeros de profesión, he pasado la vida
formándome, acudiendo a congresos periódicos y haciendo distintos
cursos sobre las disciplinas que me interesaban, poniéndome al día
dentro de la Medicina Clásica, que, aunque conste de profesionales
excelentes, está sostenida económicamente, en su mayoría, por
multinacionales farmacéuticas que son las que luego nos nutren de
fármacos y piensos con los que tratar y nutrir a nuestros
pacientes..
Con
ello, cada vez encontraba más profundidad en lo estudiado, pero no
había una amplitud, ni -generalmente- ningún tratamiento eficaz
para las patologías crónicas, que son las más habituales e
insidiosas en Medicina veterinaria.
Sólo
tratamientos con bastantes efectos secundarios y colaterales, caros,
a veces costosos de aplicar pos sus posologías y que acaban
generando mucha frustración en el paciente y su núcleo familiar y
en nosotros mismos como profesionales..
De
hecho, en el 96 junto a mi entonces compañero y pareja durante muchos años,
al que, como a mí, le motiva la curiosidad científica, establecimos
un estudio de investigación sobre las enfermedades más comunes en
nuestra clínica diaria (de transmisión por garrapatas y mosquitos)
con un antiguo profesor de la Facultad de Veterinaria de Zaragoza,
donde nos formamos, que nos apoyó desinteresadamente, que consistía
en encontrar la fiabilidad de unos kits diagnósticos de una conocida
multinacional en el que, aquellos que sepan cómo funciona ésto,
firmas de antemano una cláusula en la que aceptas desde un principio
que ellos se "reservan el derecho a la publicación" si los
resultados que obtienes no les interesan luego para vender el
producto..
Y
eso fue lo que sucedió..
Sin
más explicación cortaron la comunicación con nosotros y se acabó.
Fue
en ese momento que decidí no dar importancia a las titulaciones y
otros "méritos" de un sistema que se mueve por el interés
económico y, aunque continué y continúo aún estando al día en
Medicina clásica, estudiar e investigar aquello que llegara a mí
desde mi propia experiencia, desde cada caso y cada animal en cada
motivo de su visita a nuestro centro, ha sido mi modus operandi.. Con
ello me he motivado y se ha revertido el resultado sobre ellos
mismos, nutriéndolos a ellos, a sus humanos y a mí misma como
ser curioso que ama su profesión..
Una constante que encontré durante todo ese tiempo fue una serie de cuestiones con mucho contenido emocional que el humano me hacía sobre sobre sus peludos.. Esta fue clave para el desarrollo de mi actual trabajo.
Era
muy frecuente que me preguntaran cosas como por ejemplo si era
posible que hubieran contagiado un resfriado a su gato porque ellos
estaban primero estornudando y luego lo hacía el animal o cosas como
que si era posible que el perro les hubiera contagiado la diarrea..
Era
como muy "tangible" para ellos y ha sido una constante en
el ejercicio de mi profesión y en la de otros compañeros..
Yo me recuerdo ahora explicándoles como una cantinela lo que me habían explicado a mí sobre los parásitos, bacterias y virus específicos de especie, que los gatos tenían cosas de gatos, los perros de perros y las personas de personas y que lo que era común estaba totalmente controlado por los planes zoosanitarios y campañas de protección veterinarias.. Nunca les hablé de un Campo Mórfico porque ni siquiera conocía su existencia. Ni sabía del "contagio emocional", ni conocía entonces muchos otros aspectos que especialidades como la Medicina Biológica y la Neurociencia han desarrolado ya en la actualidad.
También he participado en acciones desinteresadas para ayudar al reino animal con adopciones (todos mis compañeros animales son adoptados o recogidos de la calle), acogidas, trabajo con protectoras y activismo en las redes, así como siendo la veterinaria de protectoras y grupos de ayuda animal durante años junto con mi exsocio y excompañero de equipo.
¿Para que estoy aquí?
Era una constante, que luego fue una guía para la comprensión de todo lo que estaba por llegarme a través de seres maravillosos como Eva Julián y la Bioacústica Aplicada, Asi Hidalgo y la Comunicación Animal y Alfredo Sach, psicoanalista, neurolingüista curioso y apasionado por la trama humana acerada e invisible.
Será
en el desarrollo del blog donde hablaré de todo lo aprendido e
investigado con ellos, con amplitud y gratitud por haberles
encontrado en el camino.
Los
tres, cada uno a su manera, guiaron mis pasos con mucho amor para que
me aceptara y me atreviera a comunicar lo que estaba observando y se
que se completaba con mis experiencias todos estos años: que
los animales tienen un papel muy importante en el desarrollo de la
conciencia del ser humano.
Que
la Tierra, que también somos nosotros,
nos grita un llamado de atención a
cómo estamos faltándonos y faltándole el respeto.
Que
nuestros compañeros de vida están vinculados
energéticamente con nosotros sus humanos.
Que muestran
en su biología con sencillas leyes y pautas orgánicas
(detalladas por el Psicoanálisis, por la Medicina de Hamer y por
otras muchas disciplinas) los campos emocionales que
los miembros de su núcleo familiar presentan tanto
en negación como manifestándolos, como un espejo de nuestras
emociones y nuestra psique.
Y
que con su comportamiento nos enseñan a estar presentes y
a veces se ofrecen a sufrir enfermedades para hacernos ver
cualquier desorden energético propio.
¿Hacia
dónde me dirijo?
Aunque bastante tímida a veces y con tendencia a la soledad (salvo la de mis propios compañeros peludos) y el silencio en la Naturaleza, soy comunicativa, muy sociable e intento explicar con asertividad lo que observo, lo que me llega desde el animal y/o su núcleo desde este y otros planos.
Mis
años de profesión y mi amor por los animales y también por los
humanos que los acompañan y a los cuales reflejan, me han otorgado
una comprensión profunda del reino animal y su vinculo con el
humano. Ese, más que ningún otro, es mi bagaje.
Será en los artículos que conformen este blog donde explique cómo he ido llegando a estas conclusiones para que mi experiencia profesional y personal llegue a todo aquel que resuene con las frecuencias de la información que ésta porta.
Estoy
aquí como NEXO entre
el animal y su humano, pero no sólo para hacerle pruebas y aplicarle
medicaciones, sino más bien para explicar al humano hasta qué nivel
puede beneficiarse de su profundo vínculo con su compañero peludo..
Cualquiera que conviva con un animal sabe de qué estoy hablando
cuando expreso "vínculo" y hasta qué punto nuestros
animales nos entienden más que nadie e incluso parece que "nos
hablen".
Mi Método:
“Tu
animal es un reflejo de ti”
Un
trato directo y cercano con el humano para encontrar el origen del
problema.
¿Qué
tipo de experiencia nos está trayendo el animal? (Posibilidad de
colaboración con el veterinario habitual del peludo a tratar)
Análisis
del animal para ver qué espeja de su núcleo familiar. (Nivel:
físico (cuerpo/mente), emocional (energético) y, en algunos casos,
incluso espiritual)
Análisis
de la situación del humano y reflejo en la experiencia que trae el
animal.
Objetivo:
-
Comprender el origen de la enfermedad y su vínculo con el proceso
vital (desorden) del humano
Evitar
dar medicación innecesaria a los animales, ya que no curan siempre
el problema y además enmascaran los síntomas.
Mostrar
cómo pueden comunicarse, cómo el animal y su humano pueden sanarse
o mejorar su calidad de vida con la toma de conciencia de qué es lo
que está ocurriendo, acompañando los procesos de la forma más
natural posible con modificaciones hacia una dieta saludable (siempre
que esto no suponga un estrés extra en el animal ni su núcleo) y un
buen manejo emocional.
Cómo
es el método:
Paseo
por el campo – opcional
Analisis
del estado del animal/humano.
Checkeo
kinesológico (opcional)
Seguimiento
del humano-paciente-animal
Visita
a Centro Veterinario de referencia si es necesario (opcional).
Restauración
médica de la salud a través de la comunicación e integración de
la conciencia.
Entendimiento
de la cuántica, de los campos energéticos que nos acompañan.
Medicina
de las emociones con herramientas como la Comunicación Animal, la
Bioacústica Aplicada y el Sistema Floral de Bach,
Aplicación
de Terapia Neural, si esta es necesaria, para la autoecoeorganización
del Sistema Neurovegetativo.
Entendimiento
de la Biología desde la conciencia: ¿qué siente el animal? ¿qué
estos yo sintiendo o manteniendo en negación?
Integración
de Medicina Clásica con Medicina Biológica, Homeopatía y otras
disciplinas, aprovechando distintos mitos y trabajando desde la
intención.
- Experiencia Clínica:
Veterinaria
desde 1995 hasta la actualidad
- Contacto:
- Colaboraciones:
EVA: EMOCIÓN-VÍNCULO-ANIMAL
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