Hace unos días, mi madre me decía que, escribiendo, podía gestionar y canalizar muchas emociones que tiendo a racionalizar.
Hoy es tiempo de hacerlo. Todo me llega sincrónico y colmado de simbología.
Decido compartirlo, aunque sea sólo con unos pocos, sin expectativa alguna, porque siento que la expresión de este sentir, puede resonar en alguien que esté viviendo lo que yo, y mover memorias en su propio campo vibratorio, para entender la muerte como un proceso de cambio.
Aprender el acompañamiento en la muerte a través del arte de la escucha y la Conexión al Alma Animal, están suponiendo una constante renovación en mis sistemas de creencias. Tan mentales, tan aprendidos, tan rígidos a veces.
...Todos tus hermanos comían y jugaban juntos, y tú andabas despistada, trasta, en lado opuesto del precioso parque de juego donde nos encontrábamos.
Aún recuerdo la primera vez que te vi con sólo dos meses.
No entraba en nuestros planes adoptar ningún otro perro más. En ese momento teníamos 10, más 6 gatos, trabajábamos ambos todo el día y Xavi tenía sólo 5 años. Y de repente, cosas de la vida, apareces tú. Con 5 meses. Tímida, nerviosa, brutota..
Este año pasado, durante el mes de noviembre, gracias a la apertura a la comunicación animal, te acercaste a mi y mientras me pedías caricias, pude escuchar claramente: "disfrútame mientras este aquí".
Pocos días después me hiciste llegar: "lo mío va a ser rápido".
Qué curioso, en menos de una semana quedaste postrada. Una hernia en la región dorsal te imposibilitaba el movimiento. Pediste a Lluís que no actuara como traumatólogo, que te escuchara como humano y le pediste que no te hiciera más pruebas ni intervenciones dolorosas. Pero que querías seguir viviendo y que eras la misma. Y hubo de aceptar.
No acabábamos de verte bien, algo se nos escapaba en el diagnóstico.. Una sólo prueba más, Reggae, déjanos indagar sobre la función de tu función tiroidea. Ese tiroides que me he pasado la vida regulando en tantos pacientes y que ahora no estaba en equilibrio, me hacía llegar mucha información sobre mi propia vida.
Como bien dicen los animales, "todo responde a un plan mayor que vosotros, humanos desde vuestras mentes, no podéis entender, porque la escucha parte de otros lugares mucho más primitivos, que forman parte del continuo que todo es."
Cómo es el ego humano y aún más el ego del "humano médico", ese que actúa desde la superioridad.
Sus radiografías de cadera y codos, su columna, con sólo 7 meses fueron ´perfectas. Sin displasias, sin alteraciones unidas a su genética tan sobreexplotada...
Estábamos convencidos de que nunca tendrías problemas articulares ni musculoesqueléticos, que nunca tendrías que pasar por ahí.
La vida y nuestra actitud ante ella, nos muestra que eso no es así.
Que si no salimos de la prisión mental que mantiene cautiva a la esencia que somos y recordamos ser también entidad biológica, nos perdemos en distintos laberintos, que hacen que nuestros amados hermanos animales, reflejen nuestra maraña enfermando e incluso muriendo por puro amor, para que nos hagamos conscientes de cuán dormidos estamos.
La Naturaleza, y los animales con ella, nos enseñan que la culpa no existe y que la pena es un sentimiento tóxico, que el sufrimiento es mental.
Pero también nos recuerdan que hemos de ser responsables, que podemos sentirnos tristes y vivir esa tristeza, y que al dolor hay que mirarlo de frente, porque la vida lo lleva asociado.
¡Cuánta Bendición y Maestría!! Gracias
Cerca de la luna llena, aún en el mes de mayo, me hiciste sentir que te estabas despidiendo de todos nosotros, que era un hecho. Me dijiste que estuviera atenta a la luna menguante, que ese iba a ser tu momento de partida.
Mi humana, metida en su cabeza, había olvidado qué día concreto iba a entrar la luna en menguante; pero la Naturaleza y tú, compañera de camino, ¡tan Maestra! me lo hicistéis saber.
Era de noche. No podía dormir, me sentía saturada.
Un viento fresco entraba por la ventana y un suave olor a tierra mojada llegó hasta mí.
Retiré los tapones de mis oídos y escuché la lluvia caer.
Salí a por ti para entrarte en casa. Sé cuánto te gusta dormir en el exterior, pero me asustaba que te mojaras.
Me acerqué a ti y estabas despierta, relajada, respirando profundamente.
Te pregunté si te parecía bien que entráramos dentro y me dijiste textualmente: "No. Esta fina lluvia no me cala. Deseo disfrutarla por última vez."
Había truenos opacos, agradables, y rayos que de repente iluminaban el cielo.
Miré la hora. Las tres de la madrugada.
Respiré. Me senté en el suelo y disfruté de tu compañía y del espectáculo que la Naturaleza nos regalaba. Agradecida.
Ahí fue cuando de golpe recordé que era noche de luna menguante.
Te miré y me dijiste: "Tres días. En tres días estaré lista."
Ayer ya no quisiste comer.
Hasta ahora te comías una carcasa entera de pollo, patas, zanahoria, manzana y brócoli con mucho apetito. También había días de apetito caprichoso, una ración de pienso biológico era adecuada en esos casos.
Pero ayer me lo hiciste sentir de otra manera. Me estabas preparando.
Aún así, mi humana egoica te dio tu medicación (sólo la del tiroides, me habías pedido). Pensábamos (aunque nuestro instinto dijera lo contrario) que quizás el cambio de tiempo te hubiera dado más dolor, esto pudiera afectar tu sistema digestivo y te produjera la sintomatología.. (y más excusas estúpidas del veterinario que llevamos dentro y que forma parte de nuestro ser humano imperfecto.)
Al abrirte la boca para hacerlo observé tus mucosas. Habían perdido el color. El retorno venoso se había enlentecido y estaban secas, anunciándome que la deshidratación previa a la muerte estaba instaurada. Tu temperatura había descendido.
Tu organismo había programado su apoptosis y he de aceptar, por mucho que me duela, que te vas.
Aún así, esta mañana me acerqué a ti con tu ración.
Esos apegos. ¡Qué complicado es a veces dejar a las cosas fluir!
Me has mirado con ternura y me has hecho llegar tu "Hoy es el día. No deseo alargarlo más."
"Entonces, ¿te aplicamos la eutanasia, te ayudamos a morir?", te he preguntado.
"Así es como debe ser. No dudes ni te sientas culpable, recuerda que la culpa no existe.
Golden está esperándome. El tránsito ha de ser así. Ya le hice ver a Lluís esta mañana. Él lo sabe también."
Como veterinaria, mi cerebro y mi razón entienden que es la opción más "compasiva".
Como humana, aunque también, no puedo evitar una presión muy dolorosa entre el pecho y la espalda. Un nudo en el estómago y una sensación de indefensión.
Las lágrimas brotan de mis ojos sin resistencia y mi llanto, de tristeza sentida, sale de mí mientras te acaricio sentanda a tu lado.
Y ahora es cuando vuelvo a repetirte "gracias, gracias, gracias", porque acompañarte en el tránsito es una bendición que me estás regalando, un acto amoroso más antes de cruzar el arco iris y llevarte en tu partida todas las experiencias que ya no son tiempo presente.
Me muestras cómo no son necesarios el sufrimiento y la tensión mental. El abatimiento. Y la importancia de reconocer el dolor y mirarlo de frente.
Tu último deseo es sentir la noche antes de partir y que tu familia humana te acompañe en ese momento.
Ojalá los grillos nos acompañen en el proceso, de esa manera amorosa con la que nos recuerdan que no tengamos miedo.
Hasta siempre, hermana, Maestra, amiga y compañera.
Mi perra por amada, no por poseída. Mi querida Reggae.
Gracias
Como todo esto ha ido ocurriendo sobre la marcha, os dejo aquí mi última conversación con Reggae (a las 14:47)
Ahora entiendo aún más el sentido de cada palabra, y agradezco y admiro su labor conmigo, con nosotros.
Bendita seas.
Os hablo calmada, serena. En armonía.
Lluís también está en calma. Agradecido.
No sé por qué, últimamente me vienen culpas y miedos por tantos animales eutanasiados durante 20 años de profesión, tantos animales sin ser escuchados.
Esos "comecome" mentales, que mi saboteadora utiliza de vez en cuando, para distraerme.
El curso que estoy haciendo con Asi Hidalgo, me está mostrando el verdadero sentido de sucesos que llevo observando desde que empecé a trabajar como veterinaria.
Cómo, incluso durante las fases de ese tránsito, puedes ir cerrando etapas y sostener mientras eres sostenida.
Me torturaba profundamente la idea de tener que dormir a Reggae.
Algo se revolvía en mi cuando alguien lo comentaba o me daba por pensarlo.
Lluís, como tantas veces dándome tierra, me decía que si así sucedía, debía de aceptarlo.
Y mi corazón lo tenía claro, pero mi mente humana, no tanto.
En silencio, esa posibilidad me aterraba, me estaba paralizando.
Por otro lado, las palabras que últimamente me ha ido diciendo mi perra, me daban a entender que iba a morir sola y tranquila en alguno de sus lugares de descanso.
No tenía por qué caer una y otra vez en ese pensamiento reiterativo.
"Humanos egoicos, qué pensáis encontrar con tanta desesperación", dicen los gatos.
Hoy, ella me ha animado a compartir esta nota.
La había escrito a boli, como siempre. Para ella. Para mi.
Llena de tachones. Pero esta no era una de mis notas habituales con apuntes que interrelacionan temas. De las que dejo entre mis papeles y que me hacen de memoria.
Es una nota de sentimientos para ser compartidos. Por eso la he publicado y la he sacado del borrador.
Le he dicho que aceptaba lo que ella decidirse.
Que acepto que soy un vehículo y que reconozco que es tiempo de vivir de otra manera y de dejar de tener miedo a equivocarme.
Tiempo de soltar autoexigencia y aflojar y soltar el control.
He sentido muchísima calma.
He llamado a Lluís y me ha dicho que efectivamente, Reggea le había dicho que se marchaba.
Hemos hablado y le he pedido que trajera el pentobarbital a casa, para pincharla por la noche.
Este es un breve fragmento de nuestra última charla:
"...Gracias por sostenerme y mostrarme lo asustada que estoy.
Por hacerme actuar.
Si tu deseo es que te ayudemos a cruzar en tu tránsito, así será. Ya no tengo miedo. Cuenta conmigo.
... ¿quieres que te entre en casa?"
"No. Mi trabajo está ya hecho. Te has liberado y me has liberado."
La he tapado un poco con una toalla, para protegerla de las moscas, que hoy estaban muy alteradas.
Nos hemos mirado y he entrado en casa.
A las 17:00h estaba muerta.
Se ha ido en paz haciéndonos el regalo de su partida, aún más liviano.
Gracias a todos por estar ahí <3
Gracias, Reggae,mi preciosa rubia saltavallas, por tanto amor <3
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
Etiquetas
Comunicacion animal
Etiquetas:
Comunicacion animal
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
Comentarios
Publicar un comentario